Leía, hace unos días, un artículo de los economistas Vicenç
Navarro y Juan Torres a raíz de la publicación de su último libro.
Desde hace días me da vueltas en la cabeza algunas de las
cosas que manifestaron, ya que según mi parecer lo que dicen tiene todo el
sentido del mundo.
Además, a mí personalmente, me convencen sus argumentos
respecto de que todo está controlado por las clases poderosas para conducirnos
allá donde les conviene para sus intereses, que obviamente son de orden
económico, político y social.
Nos avisan de que a la Banca le interesa que a los
ciudadanos nos vaya mal económicamente hablando, ya que así recurrimos a ellos para endeudarnos y poder satisfacer nuestras necesidades.
Los gobernantes vocean continuamente que habrá que recortar
las pensiones porque el sistema público no es viable, y basan su argumentación
en que el número de cotizantes a la Seguridad Social se reduce de forma
constante y eso provoca esa inviabilidad, pero opinan Navarro y Torres que ese no es el argumento, sino que
el argumento central es cómo se debe financiar la Seguridad Social.
Lo que realmente pretenden con esas voces alarmistas es que
el ciudadano recurra a los Planes de Ahorro Individuales con la Banca, y ahí
está el negocio de las Entidades Financieras, ante el peligro de sufrir una pensión insuficiente.
Conclusión: a la Banca con la crisis le va mejor que nunca.
Las medidas que los gobiernos aplican en cuanto a bajar salarios o aumentar la
precariedad del empleo tienen repercusiones directas en la economía y en la
sostenibilidad del Estado del Bienestar porque se generan menos recursos, y
debemos observar que son ellos mismos los que crean un problema para después
ofrecer la solución que conviene a sus intereses, como por ejemplo privatizar
las pensiones, y ya tienen hecho el negocio.
Así de fácil y sencillo.
Hablan de muchas más temáticas y acciones y conclusiones erróneas por parte de los Gobiernos, pero aquí sería excesivo citarlas todas, por lo que me inclino por subrayar recomendaciones que nos lanzan y que nos sitúan en el meollo de muchos de los problemas que sufrimos actualmente.
Estas recomendaciones las suscribo
totalmente (soy consciente de que yo suscriba esto pues carece del más mínimo interés, pero si con ello consigo que los que lean este artículo reflexionen unos instantes, me daré más que por satisfecho):
- nos dicen que debemos
buscar, encontrar, o crear partidos políticos que no tengan las manos atadas
por el poder financiero, ya que en la actualidad hay soluciones a la deuda del
Estado que no se solventan porque los políticos y sus partidos tienen tratados
firmados para que la banca obtenga rentabilidades del 7% cuando se podría
conseguir dinero al 0,25/0,50%
- opinan que si
conseguimos que el Banco Central Europeo financie directamente al Gobierno
evitaríamos pagos de intereses monstruosos que ahogan nuestra economía y que el
Gobierno intenta superar a base de recortes en los diferentes Ministerios y con
repercusión directa en la ciudadanía a través de la Sanidad, la Educación, el Deporte,
la Tercera Edad, los desfavorecidos, impedidos, minusválidos,…
- exhortan a la
ciudadanía a que se manifieste y se movilice, ya que ella es la única que puede
cambiar el signo de las cosas. Si a los ciudadanos no nos importa, mal vamos.
- recomiendan que no
invirtamos en Planes de Pensiones, ya que comportan mucho riesgo (léase, entre
otras, preferentes). Animan a que pongamos nuestro dinero en la Banca Cívica, y por lo menos sabremos que ese dinero no se va a malgastar ni a invertir en actividades dudosas.
Creo que merece la pena que escuchemos con atención a los
economistas Vicenç Navarro y Juan Torres. Nuestro futuro, y el de las generaciones
venideras, que son nuestros hijos y nuestros nietos, nos va en ello.
Si no eliminamos el cáncer, y este cáncer tiene nombre y
apellidos, de empresas, corporaciones, multinacionales, instituciones, y también de
particulares, el cáncer nos eliminará a nosotros.
O actuamos o nos aniquilan.