Me he ido a cenar con Migo porque necesitaba estar acompañado.
Todo fue muy bien porque, además, de repente apareció y tomamos el café con Tigo.
(He dudado si llamar a esta narración como la he bautizado o bien "Con es la mejor preposición y también proposición", pero como se trata de ser hiperbreve o textículo o ultracorto o relato mínimo o ficción súbita o relato microscópico, como diría Clara Obligado, me he decidido por Fruslería Nocturna que para noches tristes suena más andaluz y trae alegría).
No hay comentarios:
Publicar un comentario